Si bien parecía como si estuviera atrapada en la cárcel, Lindsay Lohan ha sido liberada de la misma después de que un superior juez de la corte de Los Ángeles había decidido poner a la actriz nuevamente tras las rejas.
Segun los informes, el abogado de LiLo, apeló a la decisión del juez Fox, quien había dejado en claro, no se aceptaría ninguna fianza.
A partir de esta sanción, una integrante de la corte superior dictaminó que la sentencia original era juridicamente incorrecta, ya que se trataba de una violación de libertad condicional por una condena de delito menor, así que la fianza debía ser una opción valida.
La señorita Lohan salió en libertad luego de pagar una fianza de 300.000 dólares, y obligada a seguir usando su brazalete de monitoreo.
