La princesa del pop ha decidido darse un caprichito y se ha comprado un nuevo coche. Spears ha buscado un modelo en donde sus pequeños puedan viajar cómodamente.
Britney, quien se ve cada vez al control de su vida, se ha decidido por un Mercedes Benz G55 de inspiración militar con el que sentirse segura por las calles de Los Ángeles.