Es joven, apenas un crío. Su peinado con flequillo es su seña de identidad, imitado por adolescentes de todo el mundo. Tiene millones de fans, especialmente chicas que aún van al colegio, enamoradas perdidas, aunque a cualquiera que haya cumplido la mayoría de edad a lo único que puede incitarle el chaval es a prepararle un supradyn. Parece imposible, pero la revista Time ha escogido al cantante Justin Bieber, de 17 años (aparenta 14) como una de las cien personas más influyentes del mundo. En la misma lista reina el bloguero egipcio Wael Ghonim, pero el artista canadiense no se queda atrás.
La joven estrella, que mantiene un idilio con la también cantante de la factoría Disney Selena Gomez, aparece este año en la lista de la prestigiosa revista junto a un amplio abanico de personajes . Una lista en la que cada vez hay menos políticos y más artistas, estrellas y emprendedores, sobre todo del ámbito tecnológico. Sorprende cómo alguien tan joven puede ocupar un lugar tan destacado, especialmente cuando su público es casi infantil. Si su ego no era lo suficientemente grande, ahora tiene motivos para que crezca todavía más. Pero todo lo que hace el «baby» Justin es noticia..., sobre todo si se corta el pelo.
